De manera genérica, al conjunto de pautas y estrategias que utilizan padres, madres, tutores o educadores para proteger a los menores en Internet se le denomina mediación parental. Estas medidas o estrategias tienen como finalidad:
- Conocer y aprovechar los beneficios que ofrece la Red.
- Entender y prevenir posibles riesgos del uso de Internet.
- Detectar y gestionar problemas en el entorno digital.
Según la guía de mediación parental del INCIBE estas estrategias se clasifican en:
- Estrategias activas:
- Supervisión
- Acompañamiento
- Orientación
- Estrategias restrictivas:
- Normas y límites de uso
- Aplicación de herramientas de control parental
- Configuración de opciones de privacidad
- Estrategias activas:
Combinar ambos tipos de estrategias es la opción más efectiva y segura. Los padres, madres, tutores o educadores, además de utilizar apoyos técnicos para hacer un seguimiento del tiempo de uso y los contenidos a los que acceden los menores a partir de unas normas claras y consensuadas, es importante que conozcan con quién se relacionan en Internet y qué tipo de contenidos consumen.
Es esencial establecer una relación de confianza que permita a los menores comentar y pedir ayuda o consejo ante cualquier incidencia o problema con el que se encuentren. Para ello, es conveniente compartir algunas actividades en la red en familia, crecer juntos y aprender de los errores propios o ajenos y aprovechar para potenciar las habilidades sociales y el pensamiento crítico en los más pequeños, siendo capaces de gestionar como adultos las propias conexiones tecnológicas y enseñar de manera paralela a los menores a hacer lo mismo.
A continuación, vamos a profundizar en este tema y conocer como aplicar estas estrategias con la Guía de mediación parental del INCIBE.