Desde el año 2017 llevamos oyendo hablar de la «competencia digital docente», como algo imprescindible para que los profesionales del sector educativo puedan desempeñar su labor de manera completa y acorde a las exigencias del contexto digital actual y futuro. Esto es ineludible por la presión de la propia sociedad, alumnos y familias digitales, que demandan una educación de calidad.
Dentro del proceso de transformación digital que están llevando a cabo los centros educativos, nuestra recomendación es que los planes formativos de los docentes se basen en el marco de referencia de competencias digitales básicas para la ciudadanía, elaborado por la Unión Europea, que articula las mismas en torno a 5 área diferentes:
– Información
– Comunicación
– Generación de contenidos
– Seguridad
– Resolución de problemas
Desafíos para la aplicación del marco de competencias para la docencia
Llevar la teoría a la práctica no es una cuestión sencilla, máxime con generaciones de nativos digitales cuya velocidad de adopción y aplicación de la tecnología está por encima de la de los sus formadores.
Las claves de éxito radican en:
- Aplicación práctica
- Casos de uso
- Motivación personal de los formadores
En cohaerentis, hemos diseñado un itinerario formativo precisamente muy práctico, que pretende, partiendo de las necesidades concretas y los problemas existentes en la realidad educativa, capacitar a los participantes en recursos específicos, orientados cada uno de ellos, a los diferentes ámbitos que han de cubrir, sacando el mayor partido de la tecnología como herramienta facilitadora en el proceso enseñanza-aprendizaje, así como en la interacción con la comunidad educativa.