De sobra es sabido que entre el mundo académico y el laboral existe una brecha considerable que los profesionales deben superar a base de esfuerzo, tropiezos y constancia.
Los programas formativos suelen tener un enfoque excesivamente teórico que no contempla las exigencias prácticas del desempeño laboral. Asimismo, se centran casi exclusivamente en el ámbito del conocimiento técnico, sin prestar atención a la formación en competencias, ya sean operativas, personales o digitales.
El estudio Las competencias profesionales del futuro: un diagnóstico y un plan de acción para promover el empleo juvenil después de la Covid-19, recientemente publicado, pone en evidencia este desajuste.
Os compartimos algunos de los datos más destacados.
El 83% de las empresas participantes en el estudio declararon tener dificultades para cubrir sus vacantes, por la falta de las competencias necesarias en la mayoría de los perfiles.
Estas empresas coinciden en su mayoría en que las competencias que se requieren a día de hoy son diferentes y han cambiado como consecuencia de:
– Cambios en las necesidades de los clientes – 75%
– La transformación digital – 73%
– La automatización – 63%
– La internacionalización – 57%
Las mayores dificultades las encuentran las empresas del sector tecnológico:
– El 94 % de las empresas no encuentran en los graduados los conocimientos necesarios en big data
– El 91 % en inteligencia artificial
– El 89 % en robótica
– El 88 % en marketing digital.
Por último, las competencias más difíciles de encontrar son:
– Resiliencia – 72%
– Comunicación – 58%
– Emprendimiento – 50%
– Liderazgo – 48%
– Negociación – 48%
– Iniciativa – 48%
– Visión de conjunto – 46%
Evidentemente la solución a este problema pasa por una adaptación de los programas y planes educativos a la realidad profesional de cada momento, pero, igualmente exige un esfuerzo por parte de todos los agentes involucrados: empresas, profesionales y poderes públicos.
Ana Cañas García
Consultora en Talento Digital en cohaerentis
Profesional de los Recursos Humanos